La mortalidad a causa del cáncer se ha disparado de nueva cuenta en Aguascalientes debido tanto a los problemas recurrentes que se tiene con el desabasto de los medicamentos como al “desmantelamiento” del área de Oncología Pediátrica y al impacto que ha tenido la torpe decisión de dejar al Estado al margen de los programas del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi).
Trabajadores de las áreas médicas, administrativas y de Trabajo Social del Hospital Hidalgo revelaron que por las políticas equivocadas de los directivos del hospital y del ISSEA se “desmanteló” el Área de Oncopediatría al separar a especialistas del servicio y provocar que otros más decidieran retirarse por el mal trato que recibían por parte de algunos de los jefes de la centenaria institución.
Esto trajo como consecuencia que los importantes avances que registraba Aguascalientes en los niveles de sobrevida de los niños y adolescentes con cáncer por la buena atención que recibían, comenzaran a venirse hacia abajo desde hace dos años, por lo que “lamentablemente es muy cierto lo que dicen las asociaciones y las fundaciones que apoyan con los tratamientos, sobre el aumento en las muertes de los menores con cáncer por ese tipo de problemas”.
El problema de la atención a los niños con cáncer se ha venido recrudeciendo porque las familias no pueden pagar lo que cuestan los tratamientos y porque muchos de ellos se quedaron sin acceso a la atención precisamente porque ya no se cuenta con el apoyo que se tenía de lo que antes era el Seguro Popular, hoy Insabi, explicaron.
Los médicos también explicaron que el liderazgo que llegó a tener Aguascalientes y de manera particular el Hospital Hidalgo en la cura o sobrevida del cáncer en los niños ya resulta ser una cosa del pasado, pues la calidad de la atención se vio afectada por la desbandada que hubo de especialistas por los problemas que se tuvo con los directivos del hospital y del ISSEA, lo que se combinó con el intermitente desabasto de medicamentos que se generó a partir de que Aguascalientes se retiró del Insabi por decisión de las autoridades de gobierno y de salud.
Esta problemática no sólo afecta a los niños con cáncer de Aguascalientes y a sus familias, sino a un buen número de pacientes de estados vecinos que se desplazaban hasta el Hospital Hidalgo para ser atendidos, ya que al no contar con el apoyo del Insabi a sus familias les resulta difícil cubrir los costos elevados de los tratamientos oncológicos.