Aguascalientes.- Con un hule entre el pasaje y el conductor es como los taxistas se protegen del coronavirus de los muchos viajes que cada unidad hace al día.
Además se las ingenian con otras formas de ganar dinero y algunos con su lista de precios a la vista ofertan cacahuates, chocolates y agua para sacar lo de los gastos, pagar al patrón y el gas.
Los taxistas tratan de sacar hasta el último peso en su horario de trabajo y al mismo tiempo venden botana al pasaje para recuperarse en esta contingencia.
A falta de un recurso estable, pero con la responsabilidad familiar y con los gastos que siguen en los servicios de sus casas: agua, luz, renta, despensa, todo es ayuda, por lo que han decidido adaptarse a este tipo de comercio.