Aguascalientes.- También en el caso de los suicidios hay semáforo rojo debido al curso peligroso que sigue el problema en Aguascalientes, al registrarse un suicidio cada dos días en promedio, por lo que hasta ayer la cifra se ubicaba en las 72 muertes de este tipo al cierre del quinto mes del año.
Los especialistas en salud mental advierten que los efectos del confinamiento motivado por la contingencia sanitaria, pero sobre todo la política fallida que se sigue en materia de prevención y atención del fenómeno, están incidiendo en la reproducción de las muertes premeditadas que se están presentando sobre todo entre las personas en edad productiva.
La ansiedad, depresión, la irritabilidad, la angustia y otros muchos trastornos derivados de la cuarentena que obligan a permanecer en casa, son factores que de manera directa o indirecta están influyendo para que se tome esa decisión fatal, al grado de que en varias ocasiones, desde que inició la contingencia sanitaria, se han tenido jornadas de tres y hasta cuatro suicidios en 24 horas.
El “encierro” y el hecho de que no haya comunicación o no se sepa convivir al interior de las familias, lleva a muchas personas a estar irritables, así como a angustiarse por la cuestión económica que también se ha visto afectada, mientras que algunos otros recurren al consumo de alcohol o de alguna sustancia adictiva para tratar de evadir la realidad, y al verse en un callejón sin salida terminan atentando contra su vida.
Los registros de los suicidios nos indican que este tipo de eventos se fueron al alza desde marzo, cuando empezó el problema sanitario, pues además del confinamiento se suspendieron los tratamientos para quienes acudían a las terapias, siendo ese uno de los factores que hizo que ese mes cerrara con 20 casos de suicidios, mientras que durante el mes de mayo, que concluye justamente este domingo, se generó una cifra similar.
Los 72 suicidios acumulados al día de ayer arrojan un promedio de 14.4 casos por mes, en el período enero-mayo, siendo el ahorcamiento el principal método al que recurren las personas que lamentablemente deciden poner fin a su vida.
