Más del 80% de los negocios dedicados a la venta de tortilla operan en la informalidad, situación que ha complicado cuantificar realmente los efectos negativos y el cierre de negocios con respecto al aumento en los insumos para elaborar este producto.
El secretario de la Cámara Nacional de la Industria de la Masa y la Tortilla, Alfonso Anaya Castro, señaló que es lamentable que no exista un censo real de cuántas tortillerías hay en el Estado, por lo tanto, no se tiene un estimado certero de cuántas han cerrado en lo que va de este año debido al encarecimiento de los insumos.
“No tenemos el dato exacto de cuántas tortillerías han tenido que cerrar, pero van de cinco a seis tortillerías las que habrán cerrado, pudieran ser más, pero hay muchas que operan en la irregularidad”, explicó.
Dijo que en gran medida las tortillerías son negocios familiares, por lo que siempre se busca la posibilidad de tener menores costos.
“Si no pagas la licencia municipal, pues no la pagas y ya, y ahí también está la opción que para ahorrar dinero es que si quitas empleos y metes a la familia, pues ya no pagas el seguro”, mencionó Anaya Castro.
El secretario de la cámara aseguró que el fenómeno que más están viendo con la crisis es que los dueños meten a sus familiares a trabajar.
“Muchos han perdido su empleo en las tortillerías al tiempo que crece la informalidad, pero en el mes de septiembre la Secretaría de Hacienda estará haciendo una reforma fiscal con la que se busca, al parecer, combatir la informalidad”, indicó.