En el marco de las campañas políticas de cara a las elecciones del próximo 6 de junio, la Secretaría de Gobernación advirtió que todo recinto de culto religioso que se convierta en espacio para el proselitismo político será clausurado.
A través de un documento oficial se advierte a todos los ministros religiosos sobre las sanciones a que podrían hacerse acreedores por entrometerse en el proceso electoral y tratar de inducir el voto.
La dependencia recordó que el artículo 130 de la Constitución federal hace referencia al principio histórico de la separación del Estado y las Iglesias, por lo que los ministros no podrán asociarse con fines políticos ni realizar proselitismo a favor o en contra de un candidato, partido o asociación política alguna. Tampoco podrán en reunión pública, en actos del culto o de propaganda religiosa, ni en publicaciones de carácter religioso, oponerse a las leyes del país o a sus instituciones, ni agraviar, de cualquier forma, los símbolos patrios.
Por lo tanto, tendrán que ser muy cuidadosos para no incurrir en propaganda o proselitismo político, sea en favor o en contra de candidatos(as), ideologías partidistas o de partidos políticos.
A través de la Subsecretaría de Desarrollo Democrático, Participación Social y Asuntos Religiosos, la instancia gubernamental dejó en claro, mediante escrito, que la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público establece en su artículo 32 las sanciones a las que pueden hacerse acreedores quienes incumplan las disposiciones.
Tales sanciones son el apercibimiento, la multa de hasta veinte mil días de salario mínimo general vigente, clausura temporal o definitiva de un local destinado al culto público, suspensión temporal de derechos de la asociación religiosa en el territorio nacional o bien en un estado, municipio o localidad, y la cancelación del registro de asociación religiosa.
Para evitar llegar a esas sanciones la Segob hizo un llamado a los ministros de culto de las diversas iglesias, agrupaciones y asociaciones religiosas de México para que durante el actual proceso electoral que se realiza en el país se conduzcan con estricto apego a la ley, eviten convertir un acto religioso en uno de carácter político y se abstengan de realizar proselitismo político.
“Las consideraciones aquí señaladas tienen el único propósito de contribuir a que sigamos conduciéndonos con prudencia, legalidad y responsabilidad ante el actual periodo electoral que acontece en nuestro país”, refiere textual el escrito.