Oficialmente hoy inician las posadas, sin embargo, este año se tendrán que vivir de manera distinta para prevenir los contagios del Covid-19 y evitar que la temporada concluya con más decesos, por lo que también en templos y parroquias quedarán suspendidas las celebraciones con concentraciones masivas.
Esta vez no serán las posaditas tradicionales con una gran cantidad de personas, los tamales, el ponche y la convivencia, la situación obliga a permanecer en casa y desde ahí rezar, pedir y dar posada a la Virgen y San José, como lo marca la tradición católica, señaló el vocero del Obispado, Rogelio Pedroza.
Indicó que la nueva normalidad ante la pandemia Covid-19 para quienes se dicen católicos, si realmente lo son deberán vivir las tradiciones a través de la oración, resistiéndose de los grandes festejos.