Aguascalientes.- Las familias mexicanas gastan más en bebidas azucaradas que en frutas, verduras, legumbres y leche.
Hasta hace 4 años, el gasto que se realiza en los hogares mexicanos para comprar bebidas azucaradas representa el 5.6% de sus presupuestos, mientras que solamente destinan el 2.4% para comprar legumbres y leguminosas, 3.4% para adquirir frutas y el 4.8% para la leche no endulzada, entre otros alimentos preferibles para tener un buen estado de salud.
La elevada prevalencia de sobrepeso y obesidad que se observa en la población mexicana es el resultado de un ambiente obesogénico, donde los alimentos nutritivos son menos accesibles y asequibles para algunas comunidades y donde la población está sometida de forma permanente a una alta exposición de publicidad de productos ricos en ingredientes críticos nocivos para la salud, según informes de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Para la FAO la transformación de los sistemas alimentarios es prioritaria, se requiere que estos sean saludables, resilientes y sostenibles.
Por ello la agencia especializada de las Naciones Unidas hizo un llamado a los gobiernos para que impulsen e instrumenten políticas públicas que incorporen la nutrición en sus enfoques de la agricultura y en los sistemas de protección social.
También se requieren acciones que reduzcan los factores que aumentan los costos en la producción el almacenamiento, el transporte, la distribución y la comercialización de alimentos y fomenten un cambio de comportamiento a través de la educación y una estrategia de comunicación integral, incluyendo el etiquetado claro que facilite elecciones alimentarias saludables de la población.
Mientras tanto en el libro “La obesidad en México: estado de la política pública y recomendaciones para su prevención y control”, publicado en 2019 por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), junto con la UNAM y la Academia Nacional de Medicina, se explica que los azúcares añadidos en la dieta de los mexicanos representan el 12.5% de las calorías que se consumen diariamente.
Refrescos, bebidas saborizadas, deportivas y energéticas, aguas frescas, café y té endulzados y leches saborizadas, son la principal fuente de esos azúcares pues contribuyen con el 69% del total de azúcar añadida.
Del total de la dieta de las y los mexicanos, el 10% de la energía proviene de bebidas azucaradas.