Fernando Velázquez
Guanajuato (México).- Salvatierra muy rara vez salía en el noticiero. Hasta esta semana, cuando las autoridades informaron del hallazgo de 59 cadáveres en fosas clandestinas en esta tranquila localidad del central estado mexicano de Guanajuato. Ahora, colectivos de familiares de desaparecidos temen que la cifra sea, cuanto menos, de 100 cuerpos.
Todavía faltan muchos puntos por explorar en el mismo predio, coincidieron este jueves integrantes de colectivos dedicados a buscar personas desaparecidas, consultados por Efe.
“Realmente es un cementerio ahí en Salvatierra. Y sé que se van a rebasar más de los 100 cuerpos ahí”, dijo a Efe Norma Patricia Barrón Núñez, representante de la organización Una luz en mi camino, que participa en las tareas de búsqueda.
Este miércoles, la comisionada Nacional de Búsqueda de Personas, Karla Quintana Osuna, informó en una rueda de prensa que tras ocho días de excavaciones habían sido encontrados 59 cadáveres enterrados en el predio conocido como Barrio de San Juan.
Sin embargo, todavía quedan muchos puntos por explorar, advirtió José Gutiérrez Cruz, líder del colectivo A tu encuentro.
“Muy probablemente estemos hablando de un número más cercano a los 100 cuerpos que a los 59 que tenemos ahorita, por todos los puntos que hace falta explorar”, aseguró en entrevista para Efe.
SALVATIERRA, UNA VÍCTIMA DESCONOCIDA
Salvatierra es un municipio con apenas 100.000 habitantes, ubicado en el sur de Guanajuato, actualmente la región más violenta del país por la lucha de al menos dos cárteles, el de Jalisco Nueva Generación y el de Santa Rosa de Lima.
El nombre de esta pequeña ciudad generalmente no aparece al hablar de la violencia que envuelve al céntrica estado que, pese a las circunstancias, sigue siendo uno de los principales polos de la industria automotriz en México.
Por ello, causó todavía mayor asombro que el hallazgo más grande de fosas clandestinas en Guanajuato ocurriera ahí y en un predio ubicado a apenas unos 3 kilómetros del edificio de la Alcaldía.
Barrón Núñez explicó que se decidió, en conjunto con la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas y su organismo homólogo de Guanajuato, comenzar a buscar ahí por reportes que ciudadanos hicieron a través de redes sociales.
“La gente nos dice ‘ahí escuchamos que en la noche se oyen gritos, que están como picando la tierra, escuchamos muchas cosas’, entonces ese es un signo de alerta de la misma sociedad para nosotros buscar en ese predio”, dijo.
DOLOROSA LABOR
A partir del 20 de octubre comenzaron las excavaciones y hasta ahora, de forma oficial, son 59 los cuerpos encontrados, que si bien duelen, también representan una esperanza de paz para los familiares que los buscan, algunos desde hace años.
“Lo tomamos de forma dolorosa, pero pues de alguna manera es la esperanza de poder tener paz en nuestra familia”, dijo Barrón Núñez, quien busca a su esposo -Juan, de 35 años- y a su hijo -Kevin Damián, de 17-, secuestrados en junio de 2019 en Irapuato, a 70 kilómetros de Salvatierra.
Sin embargo, reconoce que el dolor fue aún mayor al observar que en algunas fosas no solo estaban enterrados cuerpos que podrían ser de sus familiares, sino también herramientas con los cuales fueron torturados, como machetes, tablas y palas.
Por ello, incluso en los trabajos de esta búsqueda tuvo que estar presente un psicólogo para atender a los familiares que entraron en crisis al observar semejantes escenas.
Ahora, los colectivos dedicados a la dura e incierta tarea de buscar personas desaparecidas, ya sea vivas o muertas, piden que la Fiscalía estatal agilice la identificación de los cuerpos.
“Nos presumen un laboratorio que está certificado y demás, pero un laboratorio que no se da abasto y que en algunas ocasiones tarda hasta un año en generar pruebas de perfil genético para las personas desaparecidas”, comentó Gutiérrez Cruz.
Por ello, indicó que es necesario también que se establezca una mesa de identificación, en la cual la Fiscalía entregue la información necesaria para que los familiares sepan si los restos humanos que son desenterrados poco a poco pertenecen a la persona que buscan.
Desde 2018 Guanajuato es el estado más violento del país, producto de la disputa territorial que protagonizan dos grupos del crimen organizado: el Cártel Jalisco Nueva Generación y el Cártel Santa Rosa de Lima.
De enero a septiembre, han sido asesinadas 3.438 personas, aunque las autoridades sostienen que 9 de cada 10 víctimas estaban vinculadas de alguna manera con la delincuencia organizada.
Según los datos oficiales más recientes, México suma 77.171 personas no localizadas desde 1964 a la fecha.
Además, se han identificado 4.092 fosas clandestinas desde 2006, con casi la mitad ubicadas en solo cinco estados: Veracruz, Tamaulipas, Guerrero, Sinaloa y Zacatecas. EFE
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