La mejor competición de baloncesto del mundo tiene muchas peculiaridades que la convierten en especial. El progreso conseguido a nivel mundial en los últimos tiempos está fuera de toda duda, anotando audiencias en cada partido impresionantes, y teniendo una repercusión que sobrepasa con mucho las fronteras norteamericanas. Internacionalmente, gran parte de los aficionados al mundo del basket, no entienden esta liga como un producto estadounidense, sino que se ve más como un evento global que como algo focalizado en una única nación.
Una de las principales virtudes cada temporada es la igualad entre una buena terna de equipos, que optan a la conquista del anillo. Este año no iba a ser menos, y equipos renacidos como los Angeles Clippers o los Angeles Lakers parten como claros favoritos a reinar en la NBA esta campaña, según apuntan todas las apuestas en línea.
Es curioso contemplar como equipos que hace algunas campañas tenían apuros para clasificarse incluso para los playoffs, pueden optar al título. Esa es la esencia que hace tan especial a la NBA, y es que su reglamento económico permite que esto ocurra asiduamente si cada franquicia hace la cosas bien desde los despachos. Gran parte de culpa lo tiene el denominado salary cap.
El techo de gasto en plantillas está presente en la liga desde la temporada 1984-85, cuando el comisionado implantó por 3,6 millones de dólares. El progreso que ha tenido esta medida ha venido de la mano de toda la evolución de la liga. En la actualidad, el salary cap se sitúa en los 109 millones de dólares. Cifra que permite, a la totalidad de las franquicias, armar equipos competitivos y poder resurgir de sus cenizas, cuando algunas campañas no tengan el resultado esperado.
Para comprobar el avance de la liga, basta también, con analizar los salarios que perciben jugadores de primer año llamados a hacer algo grande en la liga. Michael Jordan ingresó $550.000 en su año de novato, en cambio, Zion Williamson $9,757,440 en este 2019. Sin duda síntoma inequívoco del cariz internacional y del potencial que ha conseguido la liga con el transcurso de los años.
