Ciudad de México.- El Gobierno de México declaró este martes su entrada a la fase 2 de la pandemia de COVID-19, cuando hay transmisión comunitaria, y pronosticó que el brote se propagará lentamente, lo que permitirá que sea asumible para el sistema de salud.
La decisión de México llega un día después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) clasificara a México en el nivel de contagio como “transmisión local”, conocido también como fase 2.
En una conferencia de prensa desde Palacio Nacional, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud de México, Hugo López-Gatell, afirmó que en México todavía se está en una etapa de propagación “lenta” y esto representa una “oportunidad” para controlar la epidemia, porque ya se han implementado “medidas comunitarias”.
En este contexto, dijo: “Declaramos el inicio de la fase 2. Esta fase nos permite trazar el horizonte para los siguientes 30 a 40 días donde empezaremos a visualizar que México, por haber anticipado dos semanas antes las medidas generales, medidas masivas, va a poder doblar la curva y tener menor transmisión”.
El funcionario advirtió que a pesar de esas medidas seguirán proliferando los casos.
“La expectativa no es terminar con la epidemia de un momento a otro”, apuntó el funcionario, quien remarcó que, al propagarse más lentamente la enfermedad, la epidemia también será “más larga”.
Dijo que este escenario permitirá a las autoridades sanitarias “administrar el riesgo” y así tener menos casos de los que puede atender el sistema de salud.
El funcionario recordó que hasta el lunes por la noche había en México 367 contagios de COVID-19 y cuatro fallecidos.
Explicó que en México solo el 1 % de los casos “no tienen antecedentes identificables de importación”.
SANA DISTANCIA
López-Gatell reiteró los lineamientos de la Jornada Nacional de Sana Distancia que comenzó este lunes y durará un mes y promueve el distanciamiento social, la protección de los adultos mayores, la suspensión eventos y reuniones masivas y la cancelación temporal de actividades laborales no esenciales.
López-Gatell explicó que la restricción de movilidad “es una herramienta extrema que se reserva a situaciones hipotéticas en que se perdiera la capacidad de control”.
En Ciudad de México, el gobierno local ha anunciado el cierre de cines, bares, restaurantes y otros establecimientos comerciales para evitar la propagación del coronavirus.
Además, la frontera entre México y Estados Unidos ha sido cerrada desde el pasado sábado a los cruces por motivos turísticos, aunque permanece abierta para el comercio y la asistencia sanitaria.