Un joven de 31 años de edad que sufría de una fuerte depresión y esquizofrenia, se terminó cortando las venas y murió; quien lo descubrió fue su padre, que dio parte a las autoridades.
El incidente fue reportado alrededor de las 05:39 horas al 911, donde se presentó una llamada de auxilio en la que un padre de familia solicitaba a la brevedad la intervención de los cuerpos de emergencia a la calle Insurgentes Poniente, ya que había encontrado a su hijo desangrándose.
De inmediato, policías estatales y municipales de Rincón de Romos se trasladaron al lugar de los hechos, así como paramédicos de la ambulancia ECO-432 del ISSEA, quienes confirmaron que el joven ya no contaba con signos de vida debido a las lesiones cortantes que se había provocado en el antebrazo.
Por ello, se dio aviso a personal de Servicios Periciales, quienes se encargaron de realizar el levantamiento del cuerpo y aseguraron en el lugar una navaja para rasurar.
Asimismo, cuando los policías se entrevistaron con el padre de familia, este informó que su hijo respondía al nombre de Gabriel Eduardo, que contaba con 31 años de edad y que padecía de esquizofrenia y depresión.
