CIUDAD DE MÉXICO, octubre 10 (EL UNIVERSAL).- Sergio “Checo” Pérez tuvo una gran carrera en el Gran Premio de Japón, donde cruzó la bandera a cuadros en el tercer lugar, pero que por una sanción de cinco segundos a Charles Leclerc, finalizó segundo, por lo que Red Bull hizo el 1-2 en Suzuka.
Además, el trabajo de Pérez y la victoria de Max Verstappen le permitieron al neerlandés coronarse campeón del mundo por segunda vez consecutiva en la Fórmula 1.
Pero luego de todas las actividades en Japón, Pérez volvió a casa y probablemente tuvo el mayor premio, el emotivo recibimiento que le dieron sus hijos en el aeropuerto.
Quien se encargó de compartir el momento fue Carola Martínez, la esposa del piloto 11 de Red Bull.
Ahora, la máxima categoría se prepara para visita América, primero en los Estados Unidos, luego México y por último Brasil.
